Desde una gruta artificial hasta un sistema de comunicación eléctrico para comunicarse con los sirvientes, el castillo de Neuschwanstein está lleno de sorpresas y curiosidades.
¿Quién no conoce el castillo de cuento de hadas de Baviera? El castillo de Neuschwanstein, situado a unas 2 horas de Múnich, es uno de los lugares más populares de Alemania y uno de los castillos más visitados de Europa.
Además de ser una importante atracción turística, el legendario castillo está lleno de sorpresas. Sigue leyendo para descubrir 8 datos curiosos e interesantes sobre esta fortaleza:
1. Un auténtico castillo de caballeros
El castillo de Neuschwanstein fue construido por mandato del rey bávaro Luis II, también conocido con el «Rey Loco». Su sueño era construir un castillo romántico “al estilo auténtico de los antiguos castillos alemanes”, tal y como escribió a su amigo Richard Wagner en 1869.
2. El rey no llegó a ver el castillo terminado
La construcción del castillo comenzó en 1869 y duró, aproximadamente, hasta 1892. El rey Luis II falleció en junio de 1886, por lo que nunca llegó a verlo finalizado. En el momento de su misteriosa muerte, solo se habían terminado 20 de las 200 habitaciones que tiene el castillo.
3. La principal atracción turística de Alemania
Seis semanas después de la muerte del rey, el castillo de Neuschwanstein abrió sus puertas al público y, en las primeras ocho semanas, recibió más 18 000 visitas. En los últimos tiempos, cada año se acercan a Neuschwanstein alrededor de 1,5 millones de personas.
4. Demasiado cursi
Sin embargo, el castillo no siempre fue tan popular como en la actualidad. De hecho, hasta los años 60, mucha gente lo tachaba de kitsch, es decir, hortera y cursi. Hoy en día está considerado como uno de los máximos exponentes de la arquitectura historicista.
5. Una gruta entre el salón y el despacho
¿Una cueva de estalactitas en el medio del castillo? Sí, sí, como lo oyes. Entre el salón y el despacho se creó una gruta artificial con iluminación de colores en la que, al principio, había incluso una cascada. La gruta rememora la leyenda de Tannhäuser.
6. Una sala del trono sin trono
El magnífico salón del trono del castillo abarca dos pisos y fue construido en estilo bizantino. En la sala hay una serie de pinturas murales que representan figuras sagradas como Cristo, la Virgen María, los apóstoles y los reyes canonizados. Se dice que el rey Luis no se consideraba digno de estar entre todos los santos, por lo que nunca mandó construir un trono.
7. Un castillo a la vanguardia
Aunque el castillo debía recordar a un castillo medieval, estaba equipado con los últimos avances tecnológicos, ya que disponía de calefacción central moderna, agua corriente, un sistema de comunicación eléctrico y baños con inodoros de descarga automática.
8. Inspiración para Walt Disney
No se puede negar el parecido entre el castillo y el logo de Disney. Se dice que el castillo de Neuschwanstein también fue una fuente de inspiración para muchos de los castillos de Disney, como el de la Bella Durmiente o Cenicienta.