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15 lugares emblemáticos para visitar en Japón

15 lugares emblemáticos para visitar en Japón

De los barrios de Osaka a las islas de Okinawa, y de los templos espectaculares a los parques de flores, he aquí 15 lugares icónicos para visitar en Japón.

Para muchos viajeros, Japón es un destino de ensueño. Un país repleto de atracciones culturales, platos deliciosos y tradiciones ancestrales que se mezclan con tecnología futurista. Para una persona occidental que visita este país, las costumbres, los barrios, las estaciones e incluso las alcantarillas son fuente de asombro y curiosidad. Con la Expo de Osaka 2025 a la vuelta de la esquina, muchos visitantes de todo el mundo viajarán hasta allí para la ocasión, aprovechando para explorar el resto del país.

Tanto si planeas visitarlo este año como si aún no has decidido si es el destino adecuado para ti, echa un vistazo a la recopilación con 15 lugares icónicos de Japón que, en mi opinión, representan (aunque solo parcialmente) su belleza y diversidad. En la lista, además de los grandes clásicos, encontrarás alguna que otra joya escondida.

1. Dotonbori, Osaka: el corazón palpitante de la ciudad

Comenzamos nuestro recorrido por los lugares icónicos de Japón con un barrio de Osaka. Colorido, frenético e irresistible, Dotonbori es conocido por sus letreros de neón, su vida nocturna y su deliciosa escena gastronómica. Hazte una foto junto al famoso cartel publicitario del Glico Man, saborea algunos de los platos japoneses más famosos del mundo, como los takoyaki (bolitas de masa rellenas con trozos de pulpo) y los okonomiyaki (una especie de tortita salada preparada con ingredientes variados), y déjate cautivar por el ambiente del barrio.

Dotonbori en breve

  • Dónde: Osaka.
  • Qué probar: Takoyaki y Okonomiyaki
  • Cuándo ir: después del atardecer. Las luces de neón encendidas crean una atmósfera única.

2. Fushimi Inari Taisha: 10.000 torii rojos

¿Recuerdas haber visto fotos de un montón de torii rojos flanqueando un sendero que sube por la montaña? Pues bien, esas imágenes son del Fushimi Inari Taisha, sin duda uno de los lugares más famosos de todo el país. Dedicado a Inari, la deidad sintoísta de la prosperidad, este santuario cuenta con unos 10.000 torii rojos que serpentean por la montaña, y está custodiado por numerosas estatuas de zorros, considerados mensajeros divinos. El santuario principal existe desde el año 711 d.C., pero los torii actuales han sido donados a lo largo de los siglos por devotos y empresas.

Fushimi Inari Taisha en breve

  • Dónde: Kioto.
  • La ruta: el recorrido dura unas dos horas a pie, pero realmente vale la pena, sobre todo porque a medida que subes hay menos gente, lo que hace la visita más agradable y espiritual.
  • Cuándo ir: el santuario está siempre abierto. Te recomiendo visitarlo muy temprano por la mañana para evitar las multitudes.

3. Parque Ueno, Tokio: templos, arte y nenúfares

El Parque Ueno fue el primer lugar que visité nada más llegar a Japón. Y, quizás por eso, también es uno de mis sitios favoritos en la capital japonesa. Situado en el corazón de Tokio, este oasis urbano es uno de los más grandes de la ciudad, y en su interior alberga varios puntos de interés. Hay museos, como el Museo Nacional de Tokio, templos y santuarios, como el Santuario Toshogu, un zoológico, y el estanque Shinobazu, con sus espectaculares nenúfares.

Parque Ueno en breve

  • Dónde: Tokio.
  • Un consejo: en las cálidas noches de verano, da un paseo y siéntate en un banco para ver cómo entrenan los jóvenes skaters.
  • Cuándo ir: de marzo a abril. para ver la floración de los cerezos; de julio a agosto, para ver los nenúfares del estanque Shinobazu (ve temprano por la mañana).

4. Kiyomizu-dera, Kioto: un templo en plena naturaleza

En Kioto hay muchos templos espectaculares, pero Kiyomizu-dera es uno de los que más me impresionó. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, este extenso complejo budista se construyó con madera y sin utilizar clavos. Más allá de su bella arquitectura y el simbolismo que lo rodea, uno de los aspectos más impactantes es la ubicación de los templos, que se elevan sobre la colina, con la exuberante vegetación como telón de fondo.

Kiyomizu-dera en breve

  • Dónde: Kioto.
  • Consejo: sube hasta lo alto de la colina… ¡y cuidado con los monos!
  • Cuándo ir: en otoño, cuando las hojas de los arces tiñen el paisaje de rojo y naranja.

5. Parque de Nara: ciervos, templos y el jardín botánico

El Parque de Nara, con sus ciervos sagrados, es otro de los lugares más famosos de Japón. Precisamente por eso, está algo masificado y los «encontronazos» con ciervos demasiado atrevidos están a la orden del día. Pero basta adentrarse un poco en el parque para descubrir rincones más tranquilos, ciervos menos estresados, complejos de templos maravillosos y un jardín botánico realmente espectacular. Aquí también se encuentra el Todai-ji, uno de los templos budistas más importantes de Japón, que alberga la gigantesca estatua de madera del Gran Buda, de unos 15 metros de altura.

El Parque de Nara en breve

  • Dónde: Nara.
  • Consejo: puedes interactuar de forma respetuosa con los ciervos, dándoles de comer shika senbei, unas galletas de arroz que se venden en la entrada del parque. Pero recuerda mantener una distancia prudencial: son animales salvajes (y algo estresados).
  • Cuándo ir: en mayo, cuando florecen las glicinas del jardín botánico Manyo.

 

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6. Castillo de Himeji: el castillo de la garza blanca

El Castillo de Himeji, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, es uno de los pocos castillos japoneses originales que aún se conservan. El nombre de esta obra maestra de la arquitectura feudal proviene del color blanco de sus muros, que recuerdan las alas de una garza en vuelo. Aunque es hermoso y espectacular por fuera, su interior es bastante austero. Aun así, merece la pena recorrer los jardines y descubrir su larga historia.

Castillo de Himeji en breve

  • Dónde: Himeji.
  • Consejo: los sábados, domingos y festivos se puede dar un paseo en barca por el foso interior. Es una forma alternativa y divertida de visitar el castillo.
  • Cuándo ir: temprano por la mañana, para evitar las aglomeraciones. Si no te temes las multitudes, el festival de la floración de los cerezos es un momento muy especial, con exhibiciones de koto y tambores japoneses.

7. Miyajima y el torii flotante

Si hablamos de lugares icónicos de Japón, imposible no mencionar el torii rojo de Miyajima, una pequeña isla a pocos minutos en ferry de Hiroshima. Lo especial de este torii, puerta de entrada al santuario de la isla, es que con la marea alta parece flotar sobre el agua, mientras que con la marea baja se puede caminar tranquilamente a su alrededor. Más allá del santuario, Miyajima es un destino popular entre los viajeros que visitan Japón, gracias a su ambiente sereno y relajado, el pequeño centro de la ciudad y la deliciosa gastronomía a base de pescado.

Miyajima en breve

  • Dónde: Miyajima.
  • Qué probar: ostras (crudas, hervidas o fritas)
  • Cuándo ir: con marea alta, para admirar el torii flotante.

 

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8. Okinawa: playas, buceo y cultura Ryukyu

Japón también cuenta con islas tropicales de aguas cristalinas, y el archipiélago de Okinawa es buen ejemplo de ello. Aquí se respira un ambiente diferente al resto del país, gracias a la cultura Ryukyu, que tiene influencias chinas y japonesas. Las playas más hermosas se encuentran en Miyakojima, aunque cada isla tiene sus propias joyas. Aprovecha para hacer esnórquel en los arrecifes de coral y para descubrir una gastronomía muy particular.

Okinawa en breve

  • Dónde: mar de la China Oriental, al sur de Japón.
  • Qué islas visitar: Miyako-jima y Kerama por sus playas, Naha por sus atracciones culturales y Yaeyama-jima por su naturaleza virgen.
  • Cuándo ir: la temporada de verano en Okinawa es de abril a noviembre. Pero recuerda que de junio a octubre es temporada de tifones, con mayor incidencia en agosto y septiembre.

9. Sapporo: la capital del norte

Hokkaido, la isla más septentrional del archipiélago japonés, es muy popular entre los nipones, pero a menudo pasa desapercibida para los viajeros occidentales. Sapporo, su capital, es famosa por el espectacular Festival de la Nieve con esculturas de hielo que se celebra cada febrero, aunque merece la pena visitarla durante todo el año. En esta encantadora ciudad del norte te esperan enormes parques con rutas de senderismo, templos de madera, jardines botánicos, museos de la cerveza y del chocolate, parques de arte al aire libre y mucho más. Además, es un excelente punto de partida para explorar la naturaleza salvaje que la rodea.

Sapporo en breve

  • Dónde: Hokkaido.
  • Qué probar: el ramen de Sapporo, el curry de Sapporo, el yogur y el helado.
  • Cuándo ir: en invierno, con los paisajes cubiertos de nieve fresca, es impresionante. En verano es realmente agradable, con temperaturas ligeramente más frescas que en el resto de Japón.

10. Shirakawa-go: un viaje al pasado

Shirakawa-go, situado en la prefectura de Gifu, es un pueblo histórico declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, famoso por sus características casas gassho-zukuri. Este estilo arquitectónico único se desarrolló para resistir las intensas nevadas invernales. Hoy en día, el pueblo, con sus casas bien conservadas y acondicionadas como museos, narra la historia de la región en un entorno que parece sacado de un cuento de hadas.

Shirakawa-go en breve

  • Dónde: prefectura de Gifu.
  • Qué ver: la Casa Wada, una vivienda antigua perfectamente conservada y abierta al público; Shiroyama Viewpoint, un pintoresco mirador; Casa Tajima, un museo sobre la cultura de la seda.
  • Qué probar: doburoku, un sake sin filtrar que normalmente se hace en casa.

11. Nikko: naturaleza, cascadas y espiritualidad

Las excursiones de un día a Nikko desde Tokio son muy populares. La ciudad cuenta con numerosos sitios históricos en plena naturaleza, como el majestuoso Santuario Toshogu, dedicado a Tokugawa Ieyasu. Este santuario, decorado con intrincadas tallas doradas y coloridos detalles, es una obra maestra de la arquitectura japonesa. También son imperdibles los paseos por las cascadas y los alrededores del pintoresco Lago Chuzenji, rodeado de montañas.

Nikko en breve

  • Dónde: prefectura de Tochigi.
  • Qué ver: en Santuario Toshogu, el Puente Shinkyo, y la carretera Irohazaka entre Nikko y Okunikko
  • Cuándo ir: durante la semana, para evitar las aglomeraciones

12. Los pueblos onsen

Una de las experiencias más especiales que se pueden hacer en Japón es ir a un onsen (estación termal), un ritual muy importante en la cultura japonesa. El país cuenta con numerosas ciudades termales, muchas de ellas ubicadas en paisajes naturales de ensueño. Estas son algunas de las localidades más bonitas:

  • Yudanaka Onsen: famoso por los monos de la nieve, que en invierno se sumergen en las aguas termales del parque de los monos de Jigokudani.
  • Hakone: una de las localidades termales más cercanas a Tokio, con vistas impresionantes al monte Fuji.
  • Kamisuwa Onsen: en el corazón de Japón, es conocido por sus hermosos alojamientos tradicionales (ryokan) y por la confluencia de siete fuentes termales diferentes.
  • Noboribetsu Onsen: ubicado en Hokkaido, alberga el espectacular Valle del Infierno, con vapores sulfurosos y aguas de tonos cambiantes.

 

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13. Isla de Naoshima: un museo al aire libre

Esta isla pequeñísima se ha convertido en un punto de referencia para los amantes del arte contemporáneo. Naoshima alberga algunas de las obras arquitectónicas e instalaciones artísticas más famosas de Japón, entre ellas la célebre calabaza amarilla de Yayoi Kusama. Aquí también se encuentra el Chichu Art Museum, diseñado por Tadao Ando, uno de los museos más innovadores del mundo que se integra perfectamente con el paisaje que lo rodea. En su interior pueden admirarse obras de Monet.

Naoshima en breve

  • Dónde: mar interior de Seto.
  • Qué ver: la calabaza amarilla de Yayoi Kusama y el Museo de Arte Chichu.
  • Cómo llegar: en ferry desde Takamatsu u Okayama.

14. Parque floral de Ashikaga: el jardín de flores

Desde la estación JR de Tokio se tarda menos de una hora en llegar al Ashikaga Flower Park. Este jardín botánico alberga plantas de temporada, con distintas floraciones a lo largo del año. Pero su mayor atractivo son, sin duda, los espectaculares túneles de glicinas, que en primavera crean un juego de colores en tonos violeta, rosa y blanco. El parque está abierto todo el año, y en invierno se transforma en un lugar mágico gracias al festival de luces.

Parque floral de Ashikaga en breve

  • Dónde: prefectura de Tochigi.
  • Cuándo ir: de abril a mayo, para ver la floración de las glicinas; en invierno, para el festival de las luces

15. Parque Conmemorativo de la Paz de Hiroshima: una parada imprescindible

Siempre es importante, y en este momento histórico, aún más, reflexionar y recordar los horrores de la guerra. Por eso, el último lugar que te recomiendo visitar en Japón es la ciudad de Hiroshima. Acércate al Parque Conmemorativo de la Paz, donde se encuentra la Cúpula de la Bomba Atómica (Genbaku Dome), el único edificio que quedó en pie tras la explosión de la bomba atómica en 1945. El Museo de la Paz propone un recorrido educativo sobre la historia de la ciudad y la necesidad de promover la paz en el mundo. En la actualidad, Hiroshima es una ciudad moderna y vibrante, conocida también por su plato típico: el Okonomiyaki de Hiroshima.

Parque Conmemorativo de la Paz en breve

  • Dónde: Hiroshima.
  • Por qué ir: para reflexionar sobre la importancia de la paz y conocer la historia de la ciudad
  • Qué probar: Okonomiyaki

¿Quieres conocer mejor gastronomía japonesa? Echa un vistazo a nuestro artículo sobre las 8 experiencias culinarias que no deberías perderte en Japón.

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