Lagos, cuevas, castillos y naturaleza en estado puro… descubre 15 lugares emblemáticos en Eslovenia.
Eslovenia es un país lleno de lugares interesantes, no solo desde el punto de vista arquitectónico, cultural o histórico, sino también gracias a su belleza natural. Echa un vistazo a algunos de los rincones que no deben faltar en ninguna ruta por el país, desde el castillo de Liubliana hasta el lago de Bled, pasando por la misteriosa cueva de Postojna o la Garganta de Vintgar.
1. Castillo de Liubliana
Este castillo medieval, situado en una colina en el centro de la ciudad, es uno de los emblemas del país. Durante su larga historia, la fortaleza cambió de manos en numerosas ocasiones, hasta que, en 1905 fue adquirido por el ayuntamiento de Liubliana. En la actualidad, es una atracción turística muy popular y desde su torre panorámica, cuyo punto más elevado se encuentra a 400 metros sobre el nivel del mar, es posible disfrutar de unas vistas únicas de la ciudad a sus pies.
2. Puente de los dragones
El puente de los dragones, construido sobre el río Ljubljanica, fue creado tras la destrucción del puente anterior durante el gran terremoto de 1895. El dragón es uno de los símbolos de Liubliana, y está presente no solo en este puente, sino también en el escudo de armas de la ciudad.
3. Parque Tivoli
Situado en el centro de Liubliana, el parque Tivoli ocupa una superficie aproximada de 5 km², siendo el más grande de la ciudad. Además de los numerosos árboles, parterres de flores y fuentes, el parque cuenta con un amplio elenco de estatuas. Una de las zonas más interesantes es el Paseo Jakopič, una auténtica galería al aire libre en la que a menudo se organizan exposiciones de fotografía.
4. Castillo de Predjama
Muy cerca de la cueva de Postojna, encontramos este espectacular castillo medieval ubicado en una cueva a 123 metros de altura. Durante la visita al castillo, además de repasar sus 800 años de historia y la leyenda del caballero rebelde Erasmo, los más atrevidos podrán explorar la cueva debajo del castillo, abierta al público de mayo a septiembre.
5. Cueva de Postojna
Descubierta en el siglo XIII, en la actualidad la cueva kárstica más popular de Europa cuenta con 5km abiertos al público. Un recorrido inolvidable por galerías y áreas subterráneas, como la Sala Gótica, la Sala de Congresos o el puente de Rusia, hasta llegar a la zona conocida como «Brillante», para admirar sus espectaculares estalagmitas blancas, símbolo de esta conocida atracción turística.
6. Lago de Bled
En la ciudad de Bled nos espera la única isla eslovena, situada en medio de un lago de los Alpes julianos. Para llegar a la icónica isla, se puede realizar un corto trayecto en una embarcación tradicional. Una vez allí, tras subir 90 escalones, es posible visitar la iglesia de la Asunción de la Virgen. ¡Toca la campana y pide un deseo, ya que la leyenda dice que siempre se cumplen!
7. Castillo de Bled
Una de las mejores vistas al lago de Bled es, sin duda, desde este castillo del siglo XI, situado en un acantilado a 130 metros de altura. Uno de los lugares más destacados de la fortaleza es la capilla gótica, construida en el siglo XVI. El castillo también cuenta con un interesante museo que repasa la historia de la zona. Además, durante los recorridos guiados, los visitantes tendrán la oportunidad de embotellar su propia botella de vino o aprender sobre el proceso de impresión manual.
8. Garganta de Vintgar
A 4 km de Bled, el río Radovna transcurre entre las paredes de los montes Boršt y Hom, que en algunos puntos llegan a alcanzar los 100 metros de altura. Tras un precioso recorrido a través de puentes y pasarelas de madera, la cascada Šum, de 13 metros de altura, marca el final del sendero.
9. Parque Nacional de Triglav
La montaña más alta de Eslovenia, Triglav, da nombre al único parque nacional del país, repleto de bosques, cascadas y lagos glaciares. Muchos de los lugares más emblemáticos del país (y de este recopilatorio) se encuentran dentro de los confines de este parque, como los lagos de Bled y Bohinj, o las cascadas Kozjak, Savica o Peričnik.
10. Cascada Peričnik
Con 52 metros de altura, la cascada de Peričnik es uno de los saltos de agua más espectaculares de Eslovenia. Además, uno de sus mayores atractivos es que es posible caminar por detrás de ella, lo que te permitirá disfrutar de unas vistas únicas del valle tras la “cortina” de agua.
11. Lago de Bohinj
El lago más grande del país se encuentra en el corazón del Parque Nacional de Triglav. Su belleza es tal que, en su día, la famosa escritora Agatha Christie afirmó que era “demasiado bonito para un asesinato”. Este destino es muy popular entre los amantes del turismo activo, ya que se pueden practicar un montón de actividades, desde natación y buceo, hasta paseos en barco, piragüismo o senderismo, entre otras muchas opciones.
12. Gargantas de Tolmin
En la parte sur del Parque Nacional de Triglav, nos encontramos otra maravilla de la naturaleza: las gargantas de Tolmin. Sigue el sendero señalizado y adéntrate en los espectaculares desfiladeros. Durante el trayecto, podrás admirar el agua color turquesa del río Tolminka, cruzar el Puente del Diablo o maravillarte con las Grutas de Dante o la Cabeza de Oso (una enorme roca “atascada” en los acantilados).
13. Castillo de Celje
Celje, la tercera ciudad más grande de Eslovenia, es conocida por sus aguas termales y por su enorme castillo, antigua morada de los condes de Celje. Tras recorrer las diferentes estancias de la fortaleza, los visitantes pueden acercarse a la torre de Friderik, que toma el nombre del hijo del conde Herman II. Según dicen, Friderik fue encarcelado en esta torre tras casarse, en contra de los deseos de su padre, con Veronika de Desenice.
14. Cuevas Škocjan
Declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco el 1986, las Grutas de Škocjan son un auténtico paraíso para los interesados en los fenómenos cársticos. Se trata de un conjunto de galerías subterráneas en el que podemos ver estalactitas y estalagmitas enormes, así como el cañón subterráneo más grande del mundo.
15. Lago Jasna
Cerca del pueblo de Kranjska Gora encontramos el lago Jasna, que en realidad son dos lagos artificiales conectados entre sí. Su agua cristalina y los preciosos alrededores lo convierten en un lugar perfecto para practicar senderismo.