¿Todavía no sabes qué hacer en la noche más terrorífica del año? Descubre 8 planes escalofriantes para celebrar Halloween por todo lo alto.
¿Ya sabes qué vas a hacer en la noche de brujas? Tanto si Halloween te pilla en casa como si estás de viaje, la noche del 31 de octubre hay que celebrarla como se merece. Si crees que ya no tienes edad para hacer «truco o trato» por las calles de tu ciudad o si quieres sorprender a tus hijos con un plan diferente y original, no te preocupes, ¡tenemos justo lo que necesitas!
Sigue leyendo para descubrir qué hacer en Halloween este año. He aquí 8 planes que te pondrán la piel de gallina.
1. Pasa el día en un parque de atracciones
En otoño, los parques de atracciones se transforman por completo y se llenan de vida, convirtiéndose en el lugar perfecto para celebrar Halloween con la familia o los amigos. Como era de esperar, entre los grandes referentes destacan los parques temáticos americanos. Desde septiembre hasta el 4 de noviembre, Universal Orlando Resort, en Florida, organiza las «Halloween Horror Nights», con 10 casas encantadas, incluyendo la nueva «Haunted House» dedicada a Stranger Things. Si prefieres una opción más apta para niños, entonces el «Brick-Or-Treat» de Legoland California es para ti.
En Europa es imposible no mencionar el Festival de Halloween en Disneyland® París. Durante un mes podrás codearte con todos los villanos de tus dibujos animados favoritos. En España, PortAventura, Parque Warner y el Parque de Atracciones de Madrid nos regalan un otoño cargado de demonios, monstruos y fantasmas. En Toverland, en los Países Bajos, la diversión está asegurada gracias a los desfiles monstruosos, las cinco zonas de miedo y muchas otras experiencias terroríficas. Mientras tanto, en Italia, Mirabilandia acoge el «Halloween Horror Festival», con túneles del terror para adultos y niños, y, por supuesto, tampoco faltan las adrenalínicas atracciones del parque.
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2. Descubre el lado oscuro de la ciudad
Vibrantes, vanguardistas, llenas de vida… pero lo cierto es que, detrás de todo ese esplendor, muchas ciudades a lo largo y ancho del planeta esconden un lado oscuro, con historias de crímenes violentos, edificios embrujados y leyendas misteriosas. Una de las mejores formas de celebrar Halloween es descubriendo la cara más siniestra de tu destino de viaje o de tu propia ciudad.
Si viajas a Nueva Orleans, únete a uno de los muchos tours de fantasmas, espíritus y vampiros y descubre los secretos de la ciudad más misteriosa y embrujada de Estados Unidos. En Europa, una ciudad famosa por su lado siniestro es Londres. Aquí puedes optar por hacer un tour de fantasmas al anochecer o, si lo prefieres, hacer una visita guiada siguiendo los pasos de Jack el Destripador, el famoso asesino en serie que aterrorizó el barrio de Whitechapel a finales del siglo XIX. Pero Múnich tampoco se queda atrás en lo que a historias espeluznantes se refiere. Para descubrirlas todas, nada mejor que el tour que recorre los escenarios de los crímenes más sangrientos de la ciudad alemana.
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3. Visita un castillo
Al hablar de lugares espeluznantes, no podemos olvidarnos de ¡los castillos! Protagonistas de novelas góticas y películas de horror, gracias a su larga y sangrienta historia, en estas espectaculares moradas siempre hay algún que otro fantasma o espíritu. Almas en pena condenadas a vagar entre sus muros por toda la eternidad, o inquilinos inmortales sedientos de sangre, esperando por su próxima víctima. Así que… ¿se te ocurre un plan más emocionante para Halloween?
Una visita obligada para los aficionados a las películas de horror es el Castillo de Bran, en Rumanía, el famoso castillo del Conde Drácula. Aunque no hay documentos históricos que atestigüen que Vlad Tepes, la criatura de la noche, vivió aquí, el castillo pondrá a prueba los nervios de acero de los visitantes que se atrevan a entrar en la cuarta planta, dedicada exclusivamente a la espeluznante mitología rumana. Otro castillo tan bello como siniestro es el Castillo de Edimburgo, en Escocia. Al parecer, esta fortaleza medieval es el hogar de varios fantasmas, incluyendo «The lone piper», el célebre gaitero que vaga por los subterráneos del castillo. Hay quien afirma seguir escuchando el sonido de su gaita a modo de lamento. También se pueden visitar fortalezas embrujadas en Portugal, como el Palacio de Mafra, en el que al parecer habitan extrañas ratas mutantes; y en los Países Bajos, dónde el espíritu del conde Floris V, que fue traicionado por sus compañeros de caza, sigue merodeando por el Castillo de Muiderslot, situado cerca de Ámsterdam.
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4. Explora las espectaculares catacumbas de Europa
Muchas ciudades europeas esconden bajo tierra un mundo paralelo repleto de catacumbas, búnkeres y pasajes secretos. Explorarlos es una experiencia fascinante que te permitirá apreciar tu destino de viaje desde una perspectiva completamente diferente. En Italia, las catacumbas de Roma y Nápoles son las más populares, y razones no le faltan. Las más de 50 catacumbas de Roma ocupan una superficie de 150 km, y su construcción abarca un período de tiempo que se extiende desde finales del siglo II hasta el siglo IX. Igualmente evocadoras y misteriosas son las catacumbas de Nápoles, fiel testimonio de la relación de la ciudad con la muerte durante la época clásica. Las catacumbas de París también son muy famosas. Su construcción es mucho más reciente (finales del siglo XVIII y principios del siglo XIX), y en su interior se conservan los huesos de unos seis millones de personas. Sin duda, una experiencia bastante macabra.
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5. Acércate a un cementerio monumental
Si las sugerencias anteriores no te parecen lo suficientemente aterradoras, ¡sigue leyendo! Pero te avisamos, el próximo plan tan solo es apto para los más valientes, y es que, pocas cosas ponen tanto los pelos de punta como visitar un cementerio en Halloween. A menudo, por estos lugares inextricablemente ligados a la muerte, vagan fantasmas y espíritus.
Un cementerio que ha impresionado incluso a Mark Twain, Friedrich Nietzsche y Ernest Hemingway es el cementerio monumental de Staglieno, en Génova. Además de por su enorme tamaño, este lugar es famoso por sus estatuas. Otro cementerio inquietante es el de la iglesia de Santa María en Whitby. Este cementerio, al que se llega tras subir 199 escalones, sirvió de inspiración a Bram Stoker para escribir Drácula. Una vez allí, acércate al memorial de Huntrodd, dedicado a una pareja que nació el mismo día en 1600 y murió el mismo día 80 años después. Inquietante, ¿no?
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6. Explora un lugar embrujado
Los castillos, las catacumbas y los cementerios no son los únicos lugares en los que puedes pasar miedo. Los bosques, las prisiones abandonadas y las casas encantadas son opciones estupendas para los que quieran vivir una aventura aterradora. Algunos de estos bosques se encuentran en Europa. Por ejemplo, en Alemania, la Selva Negra no solo es un fantástico destino de vacaciones, sino que también es el escenario de numerosas leyendas sobre hombres lobo, caballeros decapitados, brujas… Así que… si decides visitarlo, no te entretengas mucho y vete antes de que anochezca. El bosque de Hoia, en Transilvania, es aún más espeluznante si cabe. Además de la curiosa forma de los árboles, que se han ido torciendo con el paso de los años, en el medio del bosque hay una extraña superficie de tierra árida. Según cuentan, es una puerta a otro mundo… y algunas de las personas que la han atravesado, no han regresado todavía.
Si la naturaleza no es lo tuyo, ¡no te preocupes! En las ciudades también puedes visitar lugares embrujados. Sin ir más lejos, una leyenda urbana afirma que el metro de Londres es el hogar de varios fantasmas inquietos. En la estación de Farrington todavía se puede escuchar el grito de una joven que fue asesinada allí en el siglo XVIII. También se dice que en la estación de Elephant & Castle hay una mujer que entra todos los días y luego… desaparece como por arte de magia. ¿Quién se atreve ahora a coger el metro?
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7. Visita un museo insólito
Una de las cosas más interesantes que puedes hacer en Halloween es visitar un museo insólito e inquietante. Dos ejemplos perfectos son el Amsterdam Dungeon y el London Dungeon. Gracias a los efectos especiales, las exposiciones y las actuaciones en directo podrás descubrir el lado más oscuro de ambas capitales. Durante la visita, ¡las carcajadas y los gritos están garantizados!
Si te interesan los casos de asesinatos, el Museo de Jack el Destripador no te decepcionará. El recorrido expositivo relata la historia del asesino en serie londinense que acabó con la vida de varias mujeres en la zona de East End en 1888. En el Barrio Francés de Nueva Orleans hay otro museo muy escalofriante. Se trata del Museo de la Farmacia, donde se exponen un montón de objetos médicos que datan del siglo XIX. Por si esto fuera poco, parece ser que el fantasma del primer propietario, quien practicaba vudú, sigue vagando por el lugar.
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8. Recoge tu propia calabaza de Halloween
¿Buscas una actividad divertida para hacer en Halloween que sea apta para los pequeños de la casa? Si es así, acércate a un campo de calabazas. Los campos de calabazas son muy populares en el Reino Unido, así que, si vas a viajar a Londres durante el mes de octubre, es una experiencia imprescindible. Una buena opción es Crockford Bridge Farm, una granja situada a una hora del centro de la capital. Allí, podrás elegir la calabaza que más te guste de entre las miles que verás expuestas. Y si no quieres (o no puedes) llevarte la calabaza a casa, ¡no te preocupes! Pasear por el recinto de la granja y empaparte del mágico ambiente que se respira sigue siendo un plan excelente.
Y si hay otro país que se toma Halloween muy en serio, ese es, sin duda, Estados Unidos. Si vas a estar en Nueva York por estas fechas, toma nota. Coge el tren Maple Leaf hasta Hudson Valley y adéntrate en el espectacular mundo de Great Jack O’Lantern Blaze®. En esta experiencia inmersiva, podrás caminar entre más de 7000 calabazas talladas a mano e iluminadas con elaborados juegos de luces. ¡Una experiencia imprescindible si Halloween es una de tus épocas favoritas del año!
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