Musement te da las claves para entretenerte en la encantadora capital austríaca.
Desde hace mucho tiempo, Viena ha sido el centro intelectual de Europa, con personas de la talla de Freud y Mozart frecuentando sus cafeterías históricas y sus bonitos parques, así como también por la emperatriz Isabel, también conocida como princesa Sisi.
¿Y si te contáramos que la ciudad también tiene un creciente panorama grafitero, instalaciones para practicar surf de interior y mucha concienciación sobre la alimentación vegana? ¿O que durante la Guerra Fría su proximidad con Bratislava y la esfera de influencia soviética hizo que estuviera llena de espías? La lista de 33 cosas que hacer en Viena está repleta de experiencias inesperadas. Aunque representa todo lo que nos podemos imaginar de una visita a Viena, hay un montón de sorpresas únicas.
1. Conecta con tus deseos inconscientes en el Museo Sigmund Freud. Antes de huir de la persecución nazi, Freud escribió algunos de sus mayores aportaciones en Berggasse 19, y la ciudad aun es la sede intelectual de la psicoanálisis.
2. Coge el metro U2 al Museo del Chocolate para saciar tus deseos más golosos. El pastel de chocolate sachertorte es un imprescindible.
3. Visita la residencia de verano de la dinastía Habsburgo en el Palacio de Schönbrunn y sumérgete en el barroco.
4. El schnitzel es uno de los platos típicos de Viena. Acude a Schnitzelwirt para comerte una ración enorme.
5. Para los que no estén interesados en grandes raciones de carne frita, Veganista es la heladería vegana de la ciudad. Su instagram @veganistaicecream es un arcoíris irresistible de dulces respetuosos con los animales.
6. Aprende a distinguir una menorá de un kerze en el Museo Judío, el más antiguo del mundo, a pesar de la tumultuosa historia de la ocupación nazi de Austria.
7. ¿Pensabas que Budapest era la capital de los baños urbanos? Piénsalo de nuevo. Amalienbad es la piscina más a lo Wes Anderson en la que te bañarás.
8. ¿Te apetece hacer un poco de surf? En City Wave son pioneros en el surf de interior y ofrecen a los jóvenes vieneses la oportunidad de perfeccionar su técnica.
9. Neubau es el centro hípster de Viena. Elige atuendo a lo “gafapasta” y comparte el espíritu de este barrio.
10. Una vez te hayas vestido a la última, Fürth Kaffee es el sitio perfecto para conocer a personas afines.
11. Nos encanta Bratislava, la capital eslovaca que se encuentra a tan solo una hora en tren de Viena. No mucha gente hace esta excursión a través del antiguo Telón de Acero.
12. Mira por la ventana del Hofburg e intenta ver el presidente de Austria mientras trabaja.
13. Para los amantes de lo eclesiástico, acércate a la iglesia de San Esteban en Stephansplatz. Solo asegúrate de esperar hasta la noche para ver las iluminaciones en todo su esplendor.
14. Haz un recorrido de dos horas por la floreciente escena de grafitis de Viena y sigue el curso del Danubio.
15. ¿Tienes ganas de canalizar a tu Banksy interior después de ver los magníficos murales de la ciudad? Ve a SOMOGYI a por unos espráis y muestra tu talento en las paredes.
16. Acude al Museo de Historia del Arte de Viena, donde las lumbreras artísticas de Viena tienen sus obras expuestas. Desde los antiguos maestros a la mayor colección de Brueghels del mundo, pasando por los frescos de Klimt y los tesoros de los Habsburgo, es imposible no salir de aquí boquiabierto.
17. El zoo más antiguo del mundo, Tiergarten Schönbrunn, se fundó en 1752 y es especialmente conocido por sus pandas gigantes.
18. Ve a por pan artesano y artículos vintage en el Naschmarkt, justo debajo de Karlsplatz.
19. Pasea por el histórico Innere Stadt con una copia de Danubia de Simon Winder, que explica la rica historia de la ciudad en 600 páginas.
20. Para los fans del brutalismo y la arquitectura militar, las inmensas Torres Flak de Viena se construyeron durante la Segunda Guerra Mundial para acoger los cañones antiaéreos. Ahora están en desuso.
21. Acude a la Ópera del Estado de Viena: quedarte de pie cuesta 10 euros, un palco circular cuesta 2000. Puedes elegir una opción o probar ambas para comparar las vistas.
22. Haz una visita de temática vintage por la ciudad con Sophort, que te proporcionará cámaras Polaroid vintage para que disfrutes de la gratificación instantánea.
23. Haz un paseo nocturno por el Danubio y mira a la gente que entra y sale de los animados bares y barcas alineados a la orilla.
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24. Identifica escenas de El tercer hombre de Orson Welles en las alcantarillas de la ciudad. Aunque parezca mentira, hay guías turísticos que te llevarán ahí, si puedes aguantar el hedor.
25. Cómprate la Vienna City Card para poder ir en transporte público gratuitamente y gozar de descuentos durante 72 horas.
26. La residencia de Mozart, Mozarthaus, merece mucho la pena, aunque quizás es mejor ahorrarse el precio de la entrada y verla desde fuera, puesto que ya no quedan muchos de sus objetos personales.
27. Busca monumentos en los verdes jardines de Stadpark. Diez puntos si encuentras a Schubert.
28. Hazte un selfi en el Toilet of Modern Art, una de las atracciones más antiguas de la ciudad.
29. Enfréntate a la muerte con los restos osificados de la realeza austríaca en la Cripta de Stephandsom. Los esqueletos alineados en las paredes son especialmente espeluznantes.
30. ¿Tienes curiosidad por ver un lobo y una vaca jugando al ajedrez? ¿Y al backgammon? Un mural medieval en Bäckerstrasse 12 representa exactamente eso.
31. Mira qué hora es en un reloj diseñado para parar en el año 9999, cuando el mundo aparentemente se va a acabar, en el Museo del Reloj de Viena.
32. Un paraíso tropical lleno de mariposas de colores no parece algo que pueda formar parte de tu itinerario por Viena, pero Schmetterlinghaus ofrece esto mismo.
33. Para los que tengan sed, el frondoso valle de Wachau se encuentra a poco más de una hora de Viena y provee la ciudad de vino de sus abundantes viñedos.