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Los castillos más bonitos de Europa

Los castillos más bonitos de Europa

Revive la magia de tu infancia descubriendo los castillos más bonitos de Europa. Crea tu propio cuento de hadas visitando uno de estos palacios imperiales elegantes y majestuosos.

¿A quién de nosotros no le han acostado con cuentos de hadas y sus castillos rodeados de grandes bosques misteriosos o adornados con coloridos jardines de flores? Desde el valle del Loira al castillo de Neuschwanstein, al palacio de la princesa Sissi o a la segunda residencia de la reina Isabel II, Musement desvela los castillos más bonitos de Europa.

1. Castillos del Loira

A solamente dos horas de París, el valle del Loira es un sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco que acoge 300 castillos majestuosos, de los cuales 50 están abiertos al público. Pasea por este escenario excepcional en el corazón de la madre naturaleza y descubre estos gigantes de piedra: todos son verdaderos testimonios de la historia. Con la compañía de un guía cualificado, puedes explorar tres espectaculares castillos renacentistas en un día: Chambord, Chenonceau y Cheverny. Visita el último hogar de Leonardo da Vinci, el Château du Clos Lucé, ubicado cerca del Château royal d’Amboise, y acaba el día con un tour con cata de vinos en las bodegas Duhard.


Castillo de Chambord

2. Palacio de Fontainebleau

También en Francia y no muy lejos de París está el Palacio de Fontainebleau, el único que ha sido habitado sin interrupción durante siete siglos por monarcas franceses, desde Francisco I a Napoleón III. El castillo está construido en el estilo francés típico no solo del medievo sino también del Renacimiento y el Neoclasicismo, mostrando la transformación del arte y la arquitectura francesa a lo largo del tiempo. Apúntate a una visita guiada del palacio, que posee 1.500 estancias entre 130 hectáreas de parques y jardines, o admira el castillo rodeado de bosques desde las alturas en un inolvidable paseo en globo aerostático.


Tranquilidad en el Palacio de Fontainebleau

3. Palacio de Schönbrunn

Siendo la residencia de verano de los Austrias, el Palacio de Schönbrunn es una auténtica obra de arte barroca, un monumento emblemático de Viena y el lugar más visitado de la capital austríaca. Explora las 40 estancias del palacio, que muestran las distintas eras de la monarquía imperial y la vida de los habitantes del palacio. Pasea por los jardines de estilo francés y explora la Orangerie, símbolo de la riqueza del palacio en su época. Y, por qué no, date un capricho escuchando los suaves sonidos de un concierto de música clásica, a cargo de la famosa Orquesta de Viena del Castillo de Schönbrunn en la Orangerie del Château, donde el mismísimo Mozart tocó en 1786. Para los que crecisteis con las románticas aventuras de la princesa Sissi, no os perdáis el Palacio de Hofburg, donde se pueden visitar los apartamentos del emperador Francisco José y de la emperatriz Isabel, así como el museo dedicado a estos dos personajes.


Castillo de Schönbrunn

4. Castillo de Neuschwanstein

Símbolo de Bavaria con un aire de cuento de hadas, el castillo de Neuschwanstein es el más famoso de Alemania. Refugio de Luis II, el castillo que fue creado y habitado por un hombre soltero ahora es una de las atracciones más visitadas de Europa, que además sirvió de gran inspiración a Walt Disney. Fue construido encima de una roca escarpada a solo dos horas de Múnich y está ubicado en una ladera boscosa, un enclave tan idílico como mágico. Descubre el castillo acompañado de un guía experto, y admira también las magníficas vistas panorámicas. Luis II de Bavaria alternó sus estancias entre este castillo y Linderhof, donde encontró un refugio en los jardines del castillo de estilo rococó francés inspirado en Versalles, decorado con magníficas cuencas, cascadas y jardines en terrazas.


Castillo de Neuschwanstein

5. Castillo de Praga

Imagina un monumental castillo perteneciente a un complejo arquitectónico majestuoso compuesto por palacios antiguos, un lugar de culto con bonitos jardines. Erigido en el siglo IX, el Castillo de Praga era la residencia de los reyes de Bohemia antes de convertirse en el hogar de los presidentes de la República Checa, haciendo del castillo una representación simbólica del Estado checo. Según el Libro Guinness de los récords, es el castillo más grande del mundo, y muestra una mezcla increíble de estilo gótico y renacentista combinado con influencias del periodo barroco y románico. Reserva una visita guiada por todo el complejo, descubre el antiguo palacio real, la Catedral de San Vito, la Basílica de San Jorge y el Callejón del Oro donde Kafka vivió, el mismo lugar donde durante la edad media los alquimistas trataban de producir oro y la piedra filosofal para el emperador Rodolfo II.


Vista del Castillo de Praga

6. Castillo de Windsor

Situado a 50 km de Londres, esta fortaleza medieval es la segunda residencia de la familia real británica y el palacio real más antiguo de Europa que ha sido habitado sin interrupción y que aun a día de hoy sigue habitado. Siendo la residencia real oficial de Isabel II, el Castillo de Windsor está abierto al público todo el año, a diferencia del Palacio de Buckingham. Descubre los rincones de la finca y los aposentos de Jorge IV, que están decorados con cuadros de artistas famosos como Rubens, Rembrandt y Leonardo da Vinci. No te pierdas la capilla gótica de San Jorge, donde están enterrados 10 monarcas. Asegúrate de explorar la fabulosa Casa de Muñecas de la reina María y, si tienes la oportunidad, programa la visita para un día en que haya cambio de guardia.


La capilla de San Jorge en el Castillo de Windsor

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