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9 bonitos faros a los que viajar

9 bonitos faros a los que viajar

Mediterráneo, Atlántico, Pacífico, Índico… estos faros miran a mares y océanos, pero también a lagos, protegiendo, con su luz y su presencia, a los barcos y marineros, velando por las vidas de los que surcan sus aguas desde tantos siglos atrás.

Los amantes de las aventuras, de los lugares remotos y de los paisajes que te dejan sin respiración no se pueden perder esta lista de lugares únicos. ¿Todo listo para que empecemos la ruta?

Torre de Hércules. Galicia, España.

En todo el mundo este es el único faro romano que permanece en pie. Ya solo ese detalle lo convierte en una auténtica maravilla. Desde el siglo I, obviamente, ha pasado por varias remodelaciones y su aspecto neoclásico actual data del siglo XVIII.
En el 2008 se hermanó con la Estatua de la Libertad de Nueva York y en el 2009 el faro fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Existen varias leyendas que potencian el interés por este edificio tan particular. Se dice que Hércules llegó en barca a la costa gallega, cerca del lugar donde hoy se encuentra la torre. Y en ese punto decidió enterrar la cabeza del gigante Gerión, después de haberle vencido en combate.

Faro de Cavallería. Menorca, España.

Situado en el extremo septentrional de Menorca, este faro, que data del siglo XIX, se construyó debido a los numerosos naufragios que tenían lugar en la costa norte de la isla. El faro, una pequeña torre blanca de típica arquitectura menorquina, está situado en una península rocosa, sobre un imponente acantilado desde el que, además, tenemos una visión única de gran parte de la isla. Un paisaje impresionante tanto en un soleado día de verano como en una nublada tarde de otoño.
Además, cerca de allí tenemos un yacimiento arqueológico muy recomendado, un asentamiento que data de la edad de piedra y a que a día de hoy se encuentra bajo el nivel del mar.

Faro de Petit Minou. Plouzané, Francia.

Ubicado cerca de Brest, lo mejor de este faro es el camino que hemos de recorrer para llegar a él, y el paisaje que nos brinda a medida que nos aproximamos al edificio. En tu visita seguro que querrás parar en distintos puntos para inmortalizar esa belleza con tu cámara.
Data de mediados del siglo XIX y tiene una altura de 25 metros. Si pasas por esta zona es imprescindible, no sólo que lo visites, sino que trates de hacerlo al amanecer o bien al atardecer. ¡El esfuerzo valdrá la pena!

Faro de Fanad. Donegal, Irlanda

Este faro está situado en una península ubicada entre Lough Swilly y Mulroy Bay, al norte del condado de Donegal. En ese enclave espectacular, rodeado de la fuerza de la naturaleza que se respira en el paisaje Irlandés, tenemos una muy buena noticia: ¡Puedes alojarte en el faro! Se trata de un hotel muy particular en el que vivir momentos inolvidables a la orilla del mar del norte.

Faro Lindau. Baviera, Alemania

Este faro se ubica en el puerto de una pintoresca isla sobre el lago Constanza. Lindau am Bodensee es el nombre de la ciudad, un enclave único que valdrá la pena visitar. Recorrer sus callejuelas llenas de historia será el preludio perfecto para llegar al hermoso faro bicolor que nos espera a los pies de la bahía. Frente a él, y como una hermosa entrada al lago Constanza, verás el Nuevo Faro, junto a la imponente estatua del león bávaro. Un conjunto que, aunque más moderno, es también un importante icono de la ciudad.

Faro de Chania. Creta, Grecia

Construido en el siglo XVI para la protección de este puerto, el faro Chania sufrió algunos cambios en el siglo XIX con la ocupación turca, lo que le dio ese aspecto de Minarete. Sin embargo, la base del faro se remodeló en 2005, pero respetando su arquitectura original veneciana. Por desgracia, el faro no está abierto al público por lo que solo podemos visitarlo desde fuera, aunque cualquier paseo por esta ciudad de bellas reminiscencias cretenses y otomanas, sin duda valdrá la pena.

Portland Head Light. Maine, EEUU

Maine es un lugar perfecto para los amantes de los faros. En este estado existen más de 60, todos ellos con esa arquitectura digna de postal. Sin embargo, el más antiguo de todos ellos es el Portland Head Light. Está ubicado en el Parque Fort Williams, una zona protegida donde la naturaleza se muestra hermosa y exuberante frente a un mar todavía salvaje. Muy recomendado.

Faro ‘Les Eclaireurs’. Tierra del Fuego, Argentina

Este faro de rayas rojas y blancas supone uno de los paisajes más emblemáticos de Ushuaia. Se ubica en uno de los islotes del Canal Beagle, frente a las costas de la ciudad. Su nombre le fue dado por una expedición francesa de finales del siglo XIX.
Se pueden realizar excursiones hasta el faro aunque erróneamente lo llaman el “faro del fin del mundo” en referencia a la novela de Julio Verne aunque en realidad él se había inspirado en el Faro de San Juan de Salvamento.

Faro Raffles. Pulau Satumu, Singapur

Construido en el siglo XIX en una isla rocosa llamada Pulau Samutu, este faro está ubicado en el punto más meridional de Singapur. Las islas forman un enclave protegido en el que se encuentra la mayor concentración de vida submarina en el país, incluyendo arrecifes de coral. Una opción perfecta para quienes aman el buceo además de las grandes aventuras.

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