Musement comparte seis curiosidades de uno de los monumentos más icónicos de la capital británica.
La Torre de Londres es un símbolo tan conocido de la monarquía británica como el palacio de Buckingham. Data del siglo XI y ha sido desde una fortaleza a un palacio, pasando por una prisión y una armería. Actualmente es una de las actividades en Londres más populares entre los viajeros que visitan la ciudad. La Torre no solo alberga las preciadas joyas de la Corona, sino también leyendas, fantasmas, instrumentos de tortura e inquietantes anécdotas, además de secretos sorprendentes y divertidos. En este artículo compartimos seis de ellos.
1. Los cuervos
Si has visitado la Torre de Londres seguro que has visto cuervos. Hay un dicho antiguo que dice «si los cuervos de la Torre de Londres se pierden o se van, la Corona se verá derrotada y con ella Gran Bretaña». Los británicos se toman el dicho tan en serio que los cuervos tienen un ala recortada para que no se escapen.
2. Isaac Newton en la Torre
Durante cinco siglos la Torre de Londres albergó la Casa de la Moneda británica, donde Isaac Newton trabajó como supervisor de 1699 a 1727. No solo es uno de los científicos más importantes de todos los tiempos, sino también uno de los supervisores de seguridad más eficientes del reino. Newton se tomaba su trabajo muy en serio y dedicaba mucho tiempo y esfuerzo en llevar a los falsificadores de monedas y billetes ante la justicia.
3. Los príncipes de la Torre
Al lado de ciertos parientes, Scar, el tío de Simba en El rey león, parece hasta cariñoso. Eduardo IV murió en 1483 de forma repentina. Tenía dos hijos y su hijo mayor, Eduardo V (de doce años) era el heredero del trono. Su tío Ricardo de Gloucester los invitó a la Torre antes de la coronación, que iba a tener lugar en junio. Mientras tanto, el matrimonio de Eduardo IV fue declarado nulo, por lo que los hijos eran ilegítimos y Ricardo fue nombrado rey (Ricardo III) en julio. No volvió a saberse nada de los niños después de agosto y se cree que fueron asesinados en la Torre Sangrienta, que recibe su nombre de tal acontecimiento. En 1674 se encontraron dos esqueletos humanos infantiles en el terreno cercano a la Torre Blanca.
4. Shakespeare se inspiró en Ricardo de Gloucester
El «cariñoso» Ricardo de Gloucester, mencionado más arriba sirvió de inspiración para el personaje de Ricardo III de Shakespeare. La segunda escena del acto cuarto incluye un pasaje relativo a la encarcelación y el asesinato de dos príncipes. Estas son algunas de las palabras que Shakespeare utiliza para definirlo: monstruo deformado, perro y demonio. Sin embargo, Ricardo aún cuenta con seguidores. La Richard III Society cree que no era el monstruo que mostraba Shakespeare y lleva desde 1924 abogando por valorar su reinado de forma más objetiva.
5. La Torre Blanca
La Torre Sangrienta no es la torre más perturbadora del conjunto, a pesar de su nombre. La Torre Blanca ostenta ese honor, porque el cadalso donde muchos de los llamados traidores de la Corona daban el último suspiro se erigía en el terreno que la rodea. Traición era lo que dijera el rey que era traición y este acusaba a cualquiera al que quisiera eliminar, ya fuera por motivos políticos o por capricho. Dos de los desgraciados más famosos a los que mandó ejecutar Enrique VIII fueron Tomás Moro y su segunda esposa, Ana Bolena.
6. Los fantasmas
Cualquier buen castillo que se precie tiene un fantasma o dos y la Torre de Londres no es una excepción. El espíritu traslúcido de una mujer de la nobleza conocida como la Mujer blanca se pasea por la Torre Blanca dejando un olor peculiar tras de sí. Dicen que la han visto saludando a niños con la mano. El fantasma sin cabeza de Ana Bolena también aparece en numerosos rincones del palacio, así como dos niños pequeños vestidos con camisones blancos (se cree que son los príncipes mencionados arriba).